ningún misil iraní fue interceptado y todos impactaron en las bases yankis |
Es por todo conocido que las calamidades de las guerras, los asesinatos, el terrorismo, las masacres, son llevades a cabo por los Estados Terroristas de: Estados Unidos, Reino Unido de Gran Bretaña, Israel, y sus lacayos y aliados. Es por todos conocido que el mayor acto terrorista de la Historia, el bombardeo atómico de las ciudades de Hiroshima y Nagasaki, lo cometió Estados Unidos.
Hoy la República Islámica de Irán, con su ataque a bases militares de los Estados Unidos en Irak, ha llevado a cabo una significativa acción de autodefensa contra las acciones hostiles y traicioneras de los criminales imperialistas.
Estados Unidos vive hablando de su “lucha contra el terrorismo” y es él, junto al Estado Terrorista de Israel, el principal ejecutor de acciones terroristas. A esta altura está absolutamente claro en todo el mundo y dentro mismo de los Estados Unidos que los atentados del 11 de septiembre de 2001 fueron operaciones de falsa bandera concebidas, organizadas y ejecutadas por los más diabólicos criminales de la pandilla sionista que constituyen el Estado profundo de los Estados Unidos, para poder justificar las guerras de conquista que lanzarían sobre Afganistán, Irak, Líbano, Libia, Sudán, Siria e Irán, guerras que desde 2001 se han lanzado efectivamente, con una consecuencia de millones de asesinados y heridos, destrucción de infraestructuras y economías, todos crímenes de guerra imprescriptibles y imperdonables. Soleimaní fue un hombre de armas y de fe de primera línea en la lucha contra el terrorismo de estas naciones imperialistas, derrotando sin atenuantes a los monstruos creados por estas potencias malignas, concretamente el ISIS, Daesh, Al Qaeda, y demás etiquetas del paramilitarismo terrorista que organizan y propician “naciones civilizadas” como Estados Unidos, Gran Bretaña, Israel, Francia, Alemania, y demás “buenas gentes”. Pero con el magnicidio del Teniente General Soleimaní los anglosionistas no han hecho más que mulitiplicar infinitamente su leyenda, infundiendo aún más fervor patriótico a las masas populares que se inspiran en el ejemplo puro de Solemainí.
El Encuentro Antiimperialista CABA no puede más que expresar su más profunda, honda y sincera solidaridad con la República Islámica de Irán en su actitud digna y noble de asumir la responsabilidad, para el bien del mundo todo, de enfrentar los abusos imperialistas que están destruyendo a la Humanidad y sembrando la infelicidad y el dolor en todos los lugares donde pisan.
¡Viva la República Islámica de Irán!
¡Viva la Resistencia Antiimperialista!
¡Unidad contra el imperialismo!
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