Esa oligarquía ridícula y dañina ha liberado una vez más sus instintos racistas y vandálicos, agrediendo al pueblo trabajador de Bolivia, mintiendo descaradamente, montando pantomimas y actuaciones políticas que pretenden seriedad y solemnidad y no son más que el patético espectáculo de caprichosos "niñitos bien" que no pueden soportar que el gobierno del hermano Evo Morales sea de los mejores gobiernos que ha habido en la historia de Bolivia.
Lo que no soportan los oligarcas y la burguesía más concentrada es que un hijo del pueblo humilde, indígena, como Evo Morales, gobierne Bolivia beneficiando persistentemente a las más amplias masas populares e indígenas, que han ido conquistando derechos y bienestar.
Lo que no soportan es que Evo Morales no se arrodille a los pies de los Estados Unidos.
Lo que no soportan es que Evo Morales sea la garantía de que la renta de los enormes recursos naturales de Bolivia quede en su gran mayoría en suelo boliviano, para beneficio de la nación.
Lo que no soportan es el que las Fuerzas Armadas de Bolivia hoy, con Evo, tengan conciencia nacional, patriótica, a diferencia de las Fuerzas Armadas de Chile con Piñera, o de Argentina con Macri, o de Brasil con Bolsonaro, o de Colombia con Duque, fuerzas armadas que no son más que payasescas marionetas que sólo saben masacrar a sus pueblos, que no son más que cómicos "soldados" que han abandonado su puesto de defensa del patrimonio nacional para decirle "si, señor" a la usureros, "si, señor" a los narcotraficantes, "si, señor" a los mercaderes, "si, señor" a los avaros, "si, señor" a los soberbios, "si, míster" a los yankis... cobardes obediendo a los cobardes.
Lo que no soportan es que el pueblo de Bolivia tenga conciencia, altivez, y camine con la frente alta, y haya dejado de pensar de manera servil, como indignamente piensan los esclavos contentos con satisfacer a sus amos.
Lo que no soportan es que ya los egoísmos de la aristocracia no encuentran eco, sino sólo miradas de desprecio, o la indiferencia de quien observa a un niño hacer desmanes, pataleando y chillando porque no le compran caramelos.
Lo que no soportan es que el mundo está cambiando y que los pueblos ya están demasiado fastidiados de privilegios y burócratas, de vivos y cancheros, de oligarcas y traidores, de imperialistas y bribones, y está perdiendo la paciencia, y comienza a "tomar cartas en el asunto", y no sólo mira al histérico gritar y patalear sino que también está comenzando a actuar para neutralizar a los caprichosos, callar a los prepotentes, avasallar a los arrogantes.
Los obcecados que no entiendan esto, serán arrojados al basurero de la Historia, y eso, inevitablemente, es imposible con buenos modales. Ya lo está haciendo saber el mismo pueblo boliviano movilizado, desbordando al propio gobierno nacional de Evo, que intenta, con su mejor buena voluntad, resolver estas situaciones con la menor violencia posible, ¡al punto tal que el golpista Camacho debió ser protegido por el mismo gobierno al que quiere tumbar! (ver video más abajo)... El propio pueblo boliviano está perdiendo su moderación ante tanta provocación, tanta humillación y tanta soberbia...
Ya lo está haciendo saber el pueblo de Chile, el pueblo de Haití, el pueblo de Colombia, el pueblo de Bolivia, el pueblo de Ecuador, los pueblos todos de Nuestra América.
La provocación oligárquica está encontrando la respuesta que se merece. Los pueblos están agotando su paciencia y harán tronar el escarmiento.
¡Todos con Evo Morales y el gobierno democrático y nacionalista de Bolivia!
¡Todos con la laboriosa y digna comunidad boliviana de Argentina en la defensa de su Patria!
¡Todos este sábado contra el golpe cipayo contra Bolivia!
Sábado 9 de noviembre, 16 hs. Obelisco de Buenos Aires
¡Porque sin Soberanía no hay Patria Grande!
ENCUENTRO ANTIIMPERIALISTA - CABA
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